Edición Médica

Iván Alexander Pinto Martínez, cardiólogo pediatra y líder de la Clínica de Hipertensión Pulmonar del HIC.

Redacción. Bogotá
El Instituto Cardiovascular del Hospital Internacional de Colombia (HIC) ha alcanzado un logro de gran trascendencia en el ámbito de la salud pediátrica al inaugurar la primera Clínica de Hipertensión Pulmonar Pediátrica en la región oriental de Colombia. Este hito representa un compromiso firme con la atención médica integral de los pacientes menores de 18 años que padecen esta condición, la cual ejerce una carga sustancial en su calidad de vida.
 
Esta iniciativa multidisciplinaria ha sido liderada por un equipo de expertos compuesto por cardiólogos pediatras, neumólogos pediatras, neonatólogos, psicólogos, nutricionistas y profesionales de rehabilitación, quienes están preparados para proporcionar una atención interdisciplinaria completa para abordar los desafíos únicos que enfrentan los niños con hipertensión pulmonar.
 
La hipertensión pulmonar se ha caracterizado por el aumento de la presión en las arterias pulmonares, los vasos sanguíneos encargados de llevar la sangre desde el corazón hasta los pulmones para su oxigenación. Esta condición puede dificultar el flujo sanguíneo y la oxigenación adecuada, lo que tiene un impacto negativo en la salud general de los niños.
 
Antes de la disponibilidad de terapias específicas para esta afección, los niños diagnosticados con hipertensión arterial pulmonar idiopática, es decir, sin una causa evidente, tenían una esperanza de vida de tan solo 10 meses desde el diagnóstico inicial, según ha explicado Iván Alexander Pinto Martínez, cardiólogo pediatra y líder de la Clínica de Hipertensión Pulmonar del HIC.
 
Aunque se considera una enfermedad rara, ya que afecta a entre 17 y 20 personas por cada millón de habitantes, la hipertensión pulmonar puede tener un impacto sustancial en la calidad de vida de los niños, limitando su capacidad para participar en actividades físicas y su nivel de tolerancia.
 
El diagnóstico de esta afección puede ser altamente debilitante, especialmente en casos graves que requieren un tratamiento exhaustivo con varios medicamentos, según ha manifestado César Orlando Bretón Pinto, cardiólogo y electrofisiólogo pediatra, y líder del Programa de Cardiopatías Congénitas del Adulto del HIC.
 
Es importante destacar que la hipertensión pulmonar puede tener diversas causas, que van desde patologías cardíacas hasta enfermedades respiratorias y afecciones sistémicas, como cardiopatías congénitas que generan un aumento en el flujo sanguíneo pulmonar debido a cortocircuitos, enfermedades respiratorias crónicas y más.
 
Por su parte, Mario Javier Forero Manzano, pediatra neumólogo del HIC, ha enfatizado que prácticamente todas las enfermedades respiratorias tienen el potencial de asociarse en algún momento con la hipertensión pulmonar durante su evolución natural.
 
Los síntomas más comunes relacionados con la hipertensión pulmonar incluyen dificultad para respirar, especialmente durante el esfuerzo, fatiga persistente, episodios de desmayo relacionados con la actividad, dolor en el área torácica y, en ocasiones, tos.
 
Es importante señalar que esta afección puede derivar en complicaciones graves si no se trata a tiempo, como insuficiencia cardíaca, daño pulmonar irreversible y un mayor riesgo de coágulos en los pulmones, especialmente cuando se asocia con enfermedades pulmonares. Forero ha subrayado que esta combinación puede resultar en insuficiencia cardíaca y, en última instancia, en la muerte del niño.
 
Por lo tanto, un diagnóstico temprano es de vital importancia. La identificación precoz permite la implementación de estrategias de manejo y tratamientos que pueden ralentizar la progresión de la enfermedad. Cada paciente puede tener una causa subyacente única de la hipertensión pulmonar, por lo que un diagnóstico preciso capacita al equipo médico para identificar la razón específica y seleccionar el tratamiento más adecuado, que puede incluir medicamentos, cirugía o procedimientos invasivos.
 
El enfoque de tratamiento de la hipertensión pulmonar varía según su causa subyacente. El tratamiento se ha adaptado a la causa raíz, como apnea obstructiva del sueño, trastornos respiratorios tratables o corrección de cardiopatías congénitas. Es fundamental evaluar los síntomas de forma temprana para prevenir complicaciones a largo plazo y eventos de alto riesgo, que pueden ser evitados mediante un manejo oportuno y un tratamiento adecuado.
 
El dato
 
La Clínica de Hipertensión Pulmonar Pediátrica del HIC se ha propuesto como objetivo proporcionar una atención integral a los pacientes con esta condición. El proceso comienza con una evaluación inicial en la consulta externa, dirigida a aquellos pacientes con sospecha o diagnóstico de hipertensión pulmonar.
 
Para ello, se realizan estudios pertinentes para definir la causa de la enfermedad y proporcionar un tratamiento adecuado. Los pacientes hospitalizados que sean diagnosticados con hipertensión pulmonar durante su estancia o que sean hospitalizados por esta razón también serán evaluados por el equipo de la Clínica de Hipertensión Pulmonar y recibirán un seguimiento continuo después del alta.
 

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