Edición Médica

Pepper es un humanoide que tiene la capacidad de reconocer rostros y emociones.

Redacción. Bogotá
De acuerdo con cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el envejecimiento poblacional en Colombia ha alcanzado grandes avances. Según ha indicado la entidad, en las últimas dos décadas, la proporción de personas mayores de 60 años se ha duplicado, pasando del 7,4 por ciento en 1993, a más del 14 por ciento en la actualidad.
 
En ese sentido, la necesidad de brindar atención optima para las personas mayores de 60 años ha sido esencial sobre todo para quienes padecen enfermedades degenerativas como es el caso del alzhéimer.  
 
“La pirámide poblacional se está invirtiendo y no hay forma de que pocos jóvenes mantengan a tantos adultos mayores si no se hace un ajuste. Es una necesidad creciente en los próximos años a nivel mundial”, ha indicado Enrique González, profesor de la Facultad de Ingeniería de la Pontificia Universidad Javeriana.
 
Cabe mencionar que, en 2020, el número de personas de 60 años o más en el mundo ha superado al de niños menores de cinco años y, en 2030, una de cada seis personas tendrá 60 años o más, según ha recalcado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
 
A este crecimiento acelerado se ha sumado otra problemática: el aumento de la incidencia de enfermedades relacionadas con la edad, como el alzhéimer, que requieren de cuidados y atención especializada por parte de familiares y cuidadores.
 
De ese modo, González ha precisado que al dirigir un grupo de investigación que, en colaboración con el Departamento de Geriatría del Hospital San Ignacio de la Javeriana y la Universidad Carlos Tercero de Madrid, se desarrolló un software para robot (RES-PwA) con el objetivo de apoyar el cuidado de adultos mayores con demencia por alzhéimer en estadios leves y medios, para así mejorar su calidad de vida.
 
 El dato
 
Pepper, como se llama este robot, es un humanoide que tiene la capacidad de reconocer rostros y emociones. Es blanco, mide aproximadamente 1,20 metros de altura, tiene ojos tan expresivos como los de un cachorro, se moviliza con destreza gracias a su base con ruedas y tiene una pantalla táctil en el pecho que le permite mostrar información, imágenes y videos. Además, cuenta con altavoces y micrófonos integrados que le brindan la capacidad de hablar y escuchar a las personas. Mejor dicho, es encantador.

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