Edición Médica

Alejandro Vargas Gutiérrez, magíster en epidemiología de la Universidad de Antioquia.

Karen Juliete Rojas Gaitán. Bogotá
Un nuevo producto innovador que podría cambiar el mundo de los productos de la higiene femenina. Topsmart es un absorbente femenino con biotecnología que reacciona con los fluidos corporales de la mujer y cambia de color en caso de alteraciones con lo cual se promueve la consulta oportuna al personal de salud. Posee un biosensor basado en Biotecnología avanzada que utiliza los fluidos corporales femeninos.
 
Es de destacar que, este absorbente permite la identificación del riesgo de algunos eventos importantes en salud de las mujeres jóvenes (entre 11 y 45 años) en diferentes momentos del ciclo menstrual como: infección de vías urinarias, Hepatitis B, Hepatitis C, VIH, Cáncer de cuello uterino, Cáncer de Ovario, niveles de hormona anti-Mülleriana, vaginitis por hongos y embarazo, entre otros.
 
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, Alejandro Vargas Gutiérrez, magíster en epidemiología de la Universidad de Antioquia, ha explicado que “hace unos 10 años escuché en las noticias una nota acerca de que un inventor japonés había diseñado ropa de dormir para niños que cambia de color cuando el menor tiene fiebre, eso me pareció muy interesante”.
 
“Pasaron muchos meses en los cuales estaba trabajando en comunidades campesinas en zonas de conflicto armado, me di cuenta que los exámenes de laboratorio que le enviaba a mujeres jóvenes como exámenes de orina, embarazo, de flujo vaginal, no lograban hacérselos y yo tenía que utilizar mi habilidad clínica para poder formular los medicamentos exactos”, ha agregado Vargas Gutiérrez.
 
Asimismo, el especialista ha comentado que, “trabajaba en zonas en las que había conflicto armado y las mujeres no tenían las facilidades para ir a centros de salud u hospitales, a eso se suma que no contaban con los recursos económicos para viajar. Días después en mi casa limpiando la cocina de mi casa, se me ocurrió crear un absorbente femenino que pudiera ayudar con la falta de exámenes de las mujeres campesinas, ubicadas en zonas de difícil acceso y con bajos recursos”.
 
“Lo que hice fue mezclar la realidad de las mujeres jóvenes con respecto a los exámenes y el cambio de color de la ropa de dormir, que nos llevó al concepto de innovación de salud pública, es así como se me ocurrió crear la Topsmart que, con elementos biotecnológicos cambiara de color para detectar una enfermedad o infección en mujeres jóvenes”, ha relatado Vargas Gutiérrez.
 
Es de destacar que, la toalla higiénica y protectores de panty inteligentes han sido los productos ganadores de la Innovación de Socialab Colombia, empresa dedicada a impulsar las Innovaciones sociales en América Latina. Además, fue presentada en el Silicón Valley de California, en Singularity University (EE. UU).
 
De igual forma, el proyecto ha sido designado como ganador en el Salón de inventores de la Sociedad Antioqueña de Ingenieros y Arquitectos, ganador al premio Destapa Futuro Bavaria, Capital Semilla de la Alcaldía de Medellín y de Créame del SENA en Colombia.
 
“Todo esto se da en el concepto de innovación en salud pública, pues es bueno crear una toalla higiénica o protector higiénico, que con elementos biotecnológicos cambiará de color para detectar una enfermedad o infección a través de los fluidos corporales de la mujer, que deposita en una toalla higiénica que son: sangre menstrual, orina y flujo vaginal, eventualmente la idea con esa toalla higiénica con biotecnología es que más allá de un mini laboratorio portátil y una herramienta para poder detectar alguna enfermedad tipo infección orinaría, gonorrea, hepatitis B y C, anemia”, ha asegurado Vargas Gutiérrez.
 
Asimismo, el especialista ha enfatizado que diseñar un dispositivo biomédico genera empoderamiento en las mujeres campesinas jóvenes, indígenas y afrodescendientes, “porque cuando una mujer usa su producto de higiene corporal y detecta el riesgo de tener una enfermedad como sífilis”.
 
“Toman la decisión de ir a un centro de salud hablar con el médico y solicitar una prueba confirmatoria, ese procedimiento de detectar un evento en salud y consultar, acceder a un tratamiento, eso finalmente obedece a la determinación de una mujer empoderada”, ha explicado el especialista.
 
Finalmente, Vargas ha asegurado que este proyecto acortaría la brecha entre el médico tratante y el paciente, “a eso es lo que le apuntamos con este tipo de proyectos de innovación tecnológica en salud”, ha indicado.
 
Finalmente, el especialista ha manifestado que, “cada vez que se tiene un dispositivo biomédico que acerca a la comunidad con el médico se reduce la brecha de conocimiento. Nosotros ya hicimos varias pruebas, una de ellas de diabetes, infección orinaría, infección vaginal, pero aún se requieren 56,700 de pesos para pruebas clínicas y más equipos en biotecnología”, ha indicado Vargas.

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