Edición Médica

Carlos Valdivieso, presidente del Colegio Médico de Antioquia.

Karen Juliete Rojas. Bogotá
Desde el Colegio Médicos de Antioquia (CMA) se ha dado a conocer que, el pasado 21 de marzo dos auxiliares de Enfermería fueron secuestrados por el Clan del Golfo y el ELN, en Antioquia y Bolívar, lo cual ha encendido las alarmas entre las autoridades de Salud del departamento.


 
De acuerdo con la Secretaría de Salud de Antioquia, este no sería el único hecho violento en contra de personal médico que se ha registrado en los últimos días, ya que, también se ha presentado el hostigamiento a ambulancias en medio del paro minero.
 
“Rechazamos atentados contra ambulancias de misión médica, en El Bagre y Caucasia. Llamamos a la cordura y al respeto al Derecho Fundamental a la Salud de la población”, ha denunciado el Colegio Médico de Antioquia (CMA)
 
En diálogo con EDICIÓN MÉDICA, Carlos Valdivieso, presidente del CMA ha dicho que “con mucha preocupación registran los relatos de algunos profesionales de la Salud que han sido víctimas, al parecer, de retenciones indebidas por parte de grupos armados al margen de la ley”.
 
“El fin de estos hechos era obligar al personal médico a prestar servicios de Salud. Hacemos un llamado a la autoridad, a la población y a estos mismos grupos armados al respeto, a la integridad y a la libertad de los profesionales de la salud”, ha recalcado Valdivieso.
 
Además, el presidente del Colegio Médico de Antioquia ha señalado que “los profesionales de la Salud prestan un adecuado servicio, desinteresado a toda la población sin ninguna distinción y por lo mismo exigimos respeto”.
 
Ante los hechos, Valdivieso ha ratificado que no existe ningún tipo de protocolo de seguridad para los profesionales de la salud y ha agregado que “somos colombianos al vaivén de la región en el que vivimos y estamos sometidos a los mismos riesgos que tiene el resto de la población”.
 
El directivo también se ha referido a los atentados contra dos ambulancias de misión médica en el Bagre y Caucasia, un hecho que ha provocado rechazo a los hechos violentos que afectaron la seguridad de los pacientes, puesto que, “una de ellas transportaba una paciente gestante en la vía al municipio El Bagre y la otra en el municipio de Caucasia”, ha contado.
 
“La atención en Salud es un derecho fundamental de cualquier ciudadano, que no puede ser afectado por ningún movimiento de protesta. La violación de los derechos del resto de la población en materia tan grave desnaturaliza cualquier protesta pacífica y convierte acciones de reivindicación legítima en conductas del ámbito criminal”, ha manifestado Valdivieso.
 
Por último, el directivo ha puntualizado que “los profesionales de la Salud prestan su servicio de forma abnegada e incondicional en favor de la población, por esa razón, cualquier atentado contra nuestra seguridad, constituye un precedente de suma gravedad para cualquier sociedad”.
 
Finalmente, Valdivieso ha hecho un llamado “al respeto de la vida y la integridad de todos los pacientes y de miembros del equipo de salud, y a su defensa por parte de la sociedad, que recibe el servicio abnegado y esforzado de todos los equipos de salud en nuestro departamento”.

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