AUMENTA EL RIESGO
Enfermedades médicas dolorosas y crónicas contribuyen con el 20% de los suicidios en personas de edad avanzada
Según la OPS, el suicidio es la quinta causa más importante de años de vida ajustados por discapacidad en las Américas
Viernes, 09 de septiembre de 2022, a las 15:47
Andrea Otero, presidenta de la Asociación Colombiana de Psiquiatría (ACP).
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Redacción. Bogotá
En el marco de la 'I Cumbre Latinoamericana de Salud Mental y su Impacto en otras Enfermedades', realizada en Cartagena de Indias, se abordó al suicidio como problema de salud pública. Durante el evento,
Andrea Otero, médica especialista en psicología clínica, presidenta de la Asociación Colombiana de Psiquiatría, ha precisado que, “
la depresión está presente en más del 50 por ciento de los suicidios, y el riesgo es mayor si, adicionalmente, la persona sufre de ansiedad”.
El vínculo entre el suicidio y los trastornos mentales,
en particular, la depresión y el consumo de alcohol, ha estado bien documentado en los países de altos ingresos, según ha indicado la Organización Mundial de la Salud (OMS), no obstante, algunos casos se han presentado en menor proporción, en personas que lo cometen impulsivamente en situaciones de crisis para afrontar las tensiones de la vida, como los problemas económicos, las rupturas de relaciones o los dolores y enfermedades crónicas.
Se ha estimado que las
tasas de suicidio se incrementaron en un 17 por ciento en los años transcurridos entre 2000 y 2019, en la Región de las Américas. Por esta razón, ha sido necesario impulsar considerablemente medidas de prevención, para cumplir la meta de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ODS, de reducir en un tercio la tasa mundial de suicidios para 2030.
Adicional a ello,
el consumo de alcohol ha agravado el cuadro depresivo, lo que aumenta el riesgo suicida. Aproximadamente el 50 por ciento de estos intentos se da tras haber consumido previamente alcohol o abusado de sustancias psicoactivas, SPA.
Cabe mencionar que, casi todas las enfermedades mentales aumentan el riesgo suicida;
más del 10 por ciento de las personas con trastorno afectivo bipolar, esquizofrenia, trastorno de personalidad limítrofe o trastorno de personalidad antisocial mueren por suicidio.
Las enfermedades médicas dolorosas y crónicas contribuyen con el 20 por ciento de los suicidios en personas de edad avanzada.
Asimismo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha indica que
, el suicidio es la quinta causa más importante de años de vida ajustados por discapacidad (AVAD), en la Región de las Américas; y es la tercera causa de muerte entre los jóvenes de 20 a 24 años.
Adicional a ello, se ha tomado en cuenta que
, son las personas de 45 a 59 años quienes tienen la tasa de suicidio más alta de la Región, seguidas por las de 70 años o más.2 1 Revista CES Psicología. Suicidio y Trastorno Mental.
“Alrededor del
79 por ciento de los suicidios en la Región de las Américas ocurren en hombres. Así como, la tasa de suicidio ajustada por edad entre los varones es tres veces mayor a la de las mujeres”, ha asegurado la OPS.
Por su parte, la presidenta de la Asociación Colombiana de Psiquiatría (ACP) ha determinado que, “
los signos de advertencia no siempre son obvios y pueden cambiar de persona a persona. Algunos dejan en claro sus intenciones, mientras que otros guardan en secreto sus pensamientos y sentimientos suicidas”.
Sin embargo, el Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos, ha advertido sobre
ciertos comportamientos que pueden ser señal de que alguien está pensando en suicidarse:
-Hablar sobre: querer morirse, sentir una gran culpa o vergüenza, ser una carga para los demás.
-Sentirse: vacío, sin esperanza, atrapado o sin razón para vivir; extremadamente triste, ansioso, agitado o lleno de ira; con un dolor insoportable, ya sea emocional o físico.
-Cambiar de comportamiento, como: hacer un plan o investigar formas de morir; alejarse de los amigos, decir adiós, regalar artículos importantes o hacer un testamento; hacer cosas muy arriesgadas como conducir con una rapidez extrema; mostrar cambios de humor extremos; comer o dormir demasiado o muy poco; consumir drogas o alcohol con más frecuencia.
En definitiva, se ha precisado que
la ayuda y apoyo de la familia, los amigos y los profesionales de la Salud puede influir de manera importante en una situación donde hay pensamientos suicidas. Otero, ha hecho un llamado sobre las medidas de precaución que se pueden implementar desde el colegio, trabajo y familia:
1. Si una persona presenta señales de advertencia, preguntar sobre sus estados de ánimo y pensamientos, demuestra interés y así, esta persona puede darse cuenta que no está sola.
2. Acompañe, no juzgue, escuche, esté disponible.
3. Actúe alentando a la persona a que busque ayuda de profesionales y personas de apoyo.
4. El acompañamiento continuo por parte de familia y amigos es muy importante, pues los pensamientos de suicidio no desaparecen fácilmente.
“La mejor manera de salvar una vida
es buscar ayuda de un profesional. Prevenir el suicidio es posible, y para ello es fundamental detectar la depresión y tratarla adecuadamente. ¡Hay preguntas que salvan vidas!”, ha enfatizado la especialista.
“Con motivo del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que se conmemora el 10 de septiembre, desde la Asociación Colombiana de Psiquiatría
se ha trabajado, durante los últimos años, en una serie de campañas que pretenden dar visibilidad a esta problemática, buscando contribuir con la disminución de decisiones fatales y la mejora de la calidad de vida de las personas que no encuentran una salida”, ha concluido la especialista.
Sobre la campaña ‘PreveniEsPreguntar’
Para el año 2022 la ACP, en colaboración con un equipo de publicistas voluntarios, liderado por
Luis Miguel Ortiz Castañeda, ha recalcado que
seguirá trabajando por la NO estigmatización al hablar abiertamente sobre suicidio.
De acuerdo con la Asociación,
la campaña de este año estará enfocada en retomar y fortalecer la plataforma de comunicación que se ha creado alrededor de #PreveniEsPreguntar, hashtag que se ha consolidado en el ámbito nacional e internacional como generador de conversaciones, combatiendo de esta manera el tabú.
Se ha demostrado que preguntar directamente a las personas no los induce al suicidio, sino por lo contrario ayuda a que se expresen más fácilmente respecto a pensamientos suicidas, según ha explicado ACP; lo que
se traduce en una oportunidad de prevención, al poder prestar la ayuda necesaria a las personas, guiarla a donde un especialista y evitar que cometa el acto.