Edición Médica

Edilma Suárez, presidenta de la seccional Cundinamarca de la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia (ANEC).

Wilmer Mejía, Bogotá
Con la epidemia que se vive en el país a causa del coronavirus, se han evidenciado grandes problemas en el sistema de salud nacional. Uno de los puntos que más resaltan los profesionales es la falta de entrega de elementos de protección personal para enfrentar el virus y el retraso en pagos y las malas condiciones laborales que enfrentan, uno de los sectores que también se ha visto bastante afectados es el del personal de Enfermería.

Se han conocido casos, como en el del hospital de Facatativá, en donde “personas que han salido a manifestarse mediante un plantón pacífico, ya recibieron una amonestación por parte de la empresa que las contrata y les dijeron que si volvían a salir a protestar las iban a despedir y no las iban a volver a contratar” ha asegurado, la presidenta de la seccional Cundinamarca de la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia, (ANEC), Edilma Suárez, en diálogo con EDICIÓN MÉDICA.

Suárez ha asegurado que este tipo de medidas lo que hacen es poner al personal de Enfermería, que en su mayoría son mujeres, en una situación complicada ya que están obligadas a seguir atendiendo pacientes que pueden ser positivos para CoVID19, sin ningún tipo de protección y además sin recibir ningún tipo de salario.

La galena ha hecho especial énfasis en que el número de enfermeras con el que contaba el país antes de la epidemia era muy escaso, y que con la llegada de virus el recurso humano se está viendo limitado para la atención de los pacientes, esto sin contar con que en Colombia aún no ha llegado el pico más alto de contagios y que en caso de que esto suceda el personal no va a dar abasto para la atención de la emergencia.

Igualemnte ha exaltado la labor del personal profesional y los auxiliares en Enfermería, pues ha asegurado que, aunque el médico es quien atiende y prescribe los medicamentos para el paciente, “quien los administra es la enfermera, el que hace los cambios de posiciones, toma algunas muestras de laboratorio, valora el paciente y tiene mayor tiempo de exposición con el paciente es el personal de Enfermería”.

Por otro la ha asegurado que si esta situación ha agudizado dentro de las UCI (Unidad de Cuidados Intensivos), ya que antes de la epidemia, era alto el número de pacientes que estaban al cuidado de la enfermera y los auxiliares, y con la llegada del coronavirus, el total de pacientes ha aumentado.

Se ha referido también a la participación que la Asociación Nacional de Enfermeras, ha tenido en cuanto a las reuniones y toma de decisiones entre las agremiaciones de salud y el Gobierno Nacional, y señala como un error el hecho de que el Gobierno crea que solo “cuatro organizaciones puedan hablar por el total de las organizaciones”.

Sobre esto también ha  aseverado que la crisis ha demostrado que es un problema de discriminación de género, ya que, en su mayoría, gran parte del personal que trabaja en salud, son mujeres, pero quienes deciden y toman decisiones, la mayor parte de las veces son hombres.

De igual maneta, Suárez ha asegurado que en el gremio de la salud se tiene la esperanza de que cuando la epidemia sea superada, el Gobierno piense en mejorar completamente el sistema de salud nacional, y afirma que “no podemos volver a la normalidad, porque la normalidad antes de la pandemia era vivir esto que estamos viviendo ahora de una manera invisible sin que la sociedad supiera que esto estaba ocurriendo”.

Finalmente, han enviado un mensaje a su colegas que a pesar de que están en un momento de crisis, las asociaciones de enfermeras están trabajando para que las problemáticas que se presentan puedan ser resueltas, que espera que cuando pase la pandemia puedan tener un trabajo decente. Y se ha dirigido a los demás profesionales y les dice que “necesitamos la solidaridad de todas las profesiones, de todos los trabajadores del sector salud, para trabajar en equipo sin jerarquías, porque el poder está en la unión”.

El dato

La Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia, representa 270 mil auxiliares y cerca de 78 mil jefes de enfermería. 

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