Edición Médica

Carmen Eugenia Dávila, directora ejecutiva de Gestarsalud.

Karen Juliete Rojas. Bogotá 
El Ministerio de Salud y la comisión asesora de beneficios, tarifas y condiciones de operación del aseguramiento en Salud han decidido aumentar el valor de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), que para el 2024 se ha fijado en 12.01 por ciento; a lo que la Asociación de Empresas Gestoras del Aseguramiento en Salud de Colombia (Gestarsalud) ha expresado su desacuerdo con este cálculo.
 
En anteriores ocasiones, el gremio de aseguramiento en Salud había precisado que, el cálculo de la UPC se fijó a través de una metodología que se viene implementando desde hace 20 años, en la que se tienen en cuenta, entre otros factores, la base de suficiencia del sector para establecer el presupuesto.
 
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, Carmen Eugenia Dávila, directora ejecutiva de Gestarsalud, ha advertido que “el incremento de la UPC no reconoce desequilibrios por mayores frecuencias de uso y es insuficiente para que los prestadores asuman el costo de los servicios en el 2024”.
 
De acuerdo con Dávila, este desequilibrio entre el ingreso por UPC y los gastos y costos en salud, se ha reflejado en que “la siniestralidad es superior al 100 por ciento en dos vigencias consecutivas. Además, “se suman los problemas con el flujo de recursos y la desfinanciación permanente de presupuestos máximos que financian otras coberturas diferentes a las que se asume con la UPC. Esta situación no se corrige para 2024”, ha añadido.
 
Asimismo, la directora ejecutiva ha previsto un desfinanciamiento en el agregado de todas las EPS, “lo que conlleva a aumentar pasivos, envejecimiento de la cartera y a problemas en la prestación de los servicios y su oportunidad”.
 
Dávila ha explicado la afectación que puede generar para la prestación de los servicios de salud, “se verá en los prestadores que ya venían contratados, en especial los públicos, en el caso de régimen subsidiado, deberán ajustarse al incremento que ha definido el Gobierno y a las restricciones presupuestales”.
 
“Habrá mucha dificultad en la prestación de los servicios porque se incluyen nuevos costos con cargo a la UPC como la de los equipos básicos con el alcance que ha dicho el Minsalud. Estos equipos si bien estaban definidos en la norma, su actuar no se había financiado con cargo a la UPC”, ha anotado Dávila.
 
Cabe mencionar que, “algunas acciones en salud las realizan las EPS en especial en zonas dispersas a través de equipos extramurales con cargo a la UPC. No obstante, los equipos básicos según las normas tienen una serie de funciones adicionales y por ello costos adicionales que no se venían financiando. Aquí vamos a tener un problema mayor de desequilibrio”, ha dicho Dávila.
 
Otro aspecto que ha destacado la directora es que, “la conformación de estos equipos exige de un talento humano que probablemente no está disponible para esas tareas desde ya. Los problemas entonces los veremos en lo financiero y en la ejecución”.
 
En cuanto a la afectación de este incremento, el funcionamiento y estructura de las EPS afiliadas a Gestarsalud, Dávila ha asegurado que el problema financiero se va a agravar; afectándose las condiciones financieras de muchas EPS, ya que, “la prima pura no fue unificada. La brecha que se incrementó en 2022 continúa. Esto en contra a lo ordenado por la Corte y a la progresividad que se había logrado hasta 2021”.
 
Por último, Dávila ha solicitado al Gobierno “entender adecuadamente las decisiones, conociendo los estudios técnicos, los cuales usualmente los socializan unos días después de la decisión”.
 
“Se han ofrecido unos espacios para explicar lo sucedido con el cargue de la información de suficiencia que entregan los prestadores de servicios y consolida y entrega la EPS al Ministerio, el cual agradecemos y esperamos que se dé pronto”, ha concluido Dávila.

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