Edición Médica

Tanto médicos como trabajadores de la Salud han enfrentado amenazas de todo tipo.

Redacción. Bogotá
Las amenazas y agresiones en contra del personal de Salud en Colombia forman parte de una problemática que continúa perpetrándose en el territorio nacional, sobre todo en zonas apartadas y de conflicto armado. Desde intimidaciones a través de redes sociales o correo electrónico hasta ataques físicos y atentados, son afectaciones que ponen en peligro su vida y ejercicio profesional.
 
Gremios médicos y sociedades científicas recientemente se han pronunciado en contra de un caso de violencia suscitado en una entidad hospitalaria en Zapatoca, Santander, hacia médicos rurales; ya que, uno de los agresores había herido de gravedad a una médica que forma parte del grupo de profesionales de la Salud, quienes también fueron intimidados.
 
En el país, tanto médicos como trabajadores de la Salud han enfrentado amenazas de todo tipo, así como agresiones físicas y verbales, e incluso asesinatos mientras realizan su trabajo. Esta violencia puede provenir de pacientes, familiares de pacientes, pandillas o grupos criminales.
 
A esto se suma la falta de seguridad en los hospitales y centros de salud e incluso la impunidad para los agresores. Sin embargo, también se debe tomar en cuenta el estrés que enfrentan los médicos debido a la falta de recursos y la sobrecarga de trabajo.
 
Cabe mencionar que, el gobierno colombiano ha implementado medidas para proteger a los médicos y mejorar la seguridad en los centros de salud, pero aún queda mucho por hacer. Es necesario abordar las causas subyacentes de la violencia, como la desigualdad social, la falta de acceso a la atención médica y la presencia de grupos armados en algunas zonas del país.
 
Proteger a los médicos y garantizar un entorno seguro para que puedan realizar su trabajo es fundamental para el funcionamiento efectivo del sistema de salud en Colombia. Además, es importante sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de respetar y apoyar a los profesionales de la salud, quienes desempeñan un papel crucial en el bienestar de la población.
 
Cifras en aumento
 
Según el Observatorio Nacional de Agresiones a Profesionales de la Salud en Colombia, se reportaron un total de 1,289 agresiones a profesionales de la salud en el año 2020. Estas agresiones incluyen casos de violencia física, verbal, psicológica y sexual.
 
En 2020, se registraron 91 incidentes e infracciones contra la Misión Médica en Colombia, de los cuales el 40 por ciento ocurrieron en Norte de Santander. De igual forma, en la pandemia por COVID-19 las agresiones aumentaron con un total de 256 casos reportadas en el primer semestre de 2021. Las agresiones se han dado en diferentes entornos de atención médica, incluyendo hospitales, clínicas, consultorios y servicios de atención domiciliaria.
 
De acuerdo con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), se ha evidenciado que cada vez más trabajadores sanitarios en las zonas de mayor afectación por conflictos armados afirman ser víctimas de amenazas y extorsiones.
 
Seguridad de médicos en hospitales colombianos
 
La seguridad de los médicos en hospitales colombianos es un tema importante que involucra varios aspectos, incluyendo la protección contra la violencia en el lugar de trabajo, la disponibilidad de equipos de protección personal, y la implementación de protocolos de seguridad.
 
Los médicos cuentan con protecciones legales frente a agresiones en el ejercicio de su labor. La Ley 1949 de 2019 establece medidas de protección para el personal de la salud, incluyendo a médicos, enfermeras y demás profesionales que trabajan en instituciones de salud.
 
Esta ley establece que cualquier agresión física o verbal hacia el personal de la salud será considerada como una falta grave y será sancionada de acuerdo con las leyes penales y disciplinarias vigentes. Además, se establecen medidas de prevención y protección para garantizar la seguridad de los trabajadores de la salud en su lugar de trabajo.
 
En Colombia existen leyes y medidas de protección para garantizar la seguridad y el bienestar de los médicos frente a agresiones en el ejercicio de su labor. Sin embargo, es importante seguir promoviendo la cultura del respeto hacia el personal de la salud para prevenir cualquier tipo de violencia en el ámbito médico.

---