Edición Médica

Sergio Álzate, jefe de Cirugía Cardiovascular del Hospital Universitario Nacional (HUN).

Karen Juliete Rojas. Bogotá 
En el marco del Día Mundial de las Cardiopatías Congénitas, que se conmemora cada 14 de febrero, se destaca el progreso significativo en el diagnóstico y tratamiento de estas condiciones médicas, no obstante, se estima que afectan a aproximadamente 1 de cada 100 bebés nacidos vivos, siendo una de las principales causas de mortalidad infantil en muchas partes del mundo.
 
Gracias a los avances en la medicina y la tecnología, cada vez más niños nacen con cardiopatías congénitas y logran sobrevivir hasta la edad adulta. En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, Sergio Álzate, jefe de Cirugía Cardiovascular del Hospital Universitario Nacional (HUN), ha explicado que esa condición en nuestro país que tiene muchas dificultades “aún se presenta diagnósticos tardíos”.
 
“Tiene una prevalencia que está dentro del 5 al 9 por ciento por cada mil niños que nacen, entonces dentro de la estadística que se maneja es que aproximadamente la mitad de los pacientes son llevados a una intervención para resolver la condición”, ha anotado.
 
Álzate ha recalcado que “ese diagnóstico se hace idealmente es en estados prenatales, entonces esos pacientes ya vienen con un diagnóstico intrauterino, ya viene con estudios ecocardiográficos, ecografía específica para ver la anatomía del corazón y por lo que desde ese momento se define si requieren la intervención”.
 
Asimismo, ha señalado que “esa condición puede ser estructural del mismo corazón de las válvulas, que son puertas que están dentro del corazón y no se forman o están cerradas, en otros casos las paredes que viven el corazón que se llama tabiques auriculares o ventriculares y no se forman”.
 
Cabe anotar que, el jefe de Cirugía Cardiovascular del Hospital Universitario Nacional ha subrayado que “muchos pacientes llegan con condiciones de cardiopatías congénitas a la adultez, pero con daños estructurales como signos de sobrecarga a nivel pulmonar por ese sangrado que no debería estar ahí y nos toca resolverlo hasta decir que no se puede operar”.
 
“Esto debido a que, la enfermedad ya ha generado muchos cambios, pero otras enfermedades que son más complejas como las tetralogías o que no se forme una válvula o completamente una pared dentro del corazón son de diagnóstico muy temprano y son niños que nacen esa condición”.
 
Por último, el experto ha puntualizado que “lo importante es que si se diagnostica sea remitido a un centro especializado al nacer, pero como en nuestra población muchos de los niños nacen en caseríos o con parteras en las zonas más apartadas, pues a veces se dificulta su diagnóstico y atención oportuna. 
 

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