Edición Médica

Jorge Alberto Cortés, Infectólogo de la Universidad Nacional de Colombia.

Karen Juliete Rojas Gaitán. Bogotá
En Colombia se han detectado nuevas variantes de COVID-19 en varias ciudades del país. Una de ellas es Bogotá, luego de que el Laboratorio de Salud Pública de Bogotá y el laboratorio Gencore de la Universidad de los Andes, en una alianza para desarrollar la estrategia Vigilancia Genómica a nivel distrital, implementaron un protocolo de PCR y RT-PCR para detectar las mutaciones reportadas en las variantes del Reino Unido, Brasil y Sudáfrica, confirmando así la presencia de este tipo de variantes virales en la urbe. Igualmente, se han confirmado en Medellín y Cartagena.
 
Es de destacar que, bajo este protocolo en el cual se tamizan previamente muestras que pasarán a secuencia (optimizando de este modo el recurso para secuenciación), se han analizado 443 muestras (de tamizajes de los meses de diciembre de 2020 y de enero al 7 abril de 2021) que cumplieron con los criterios establecidos por el Instituto Nacional de Salud (PCR positivo con CT menor o igual a 25), las que, además, se caracterizaron preferentemente por ser: 
  En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, Jorge Alberto Cortés, Infectólogo del hospital Universitario Nacional, profesor de la Universidad Nacional de Colombia, ha explicado que “las diferencias entre las distintas variables es que presentan mutaciones, especialmente en el sitio en el cual se pega el virus a los receptores en las células humanas, esas pequeñas mutaciones pueden cambiar la capacidad para pegarse a ese receptor y se cree que eso tiene un impacto sobre la transmisibilidad del virus”.
 
Cortés ha agregado que “el efecto más importante que tienen estás variantes es la posibilidad de trasmitirse más rápidamente el virus de una persona a otra. Hasta el momento no se ha podido documentar que ninguna de las dos variantes tenga mayor efecto en términos de letalidad o posibilidad de enfermarse”.
 
Es de destacar que, cada uno de los individuos a los que se les realizó la muestra, de donde se aislaron estas variantes, están siendo atendidos conforme los protocolos epidemiológicos. Ninguno ha fallecido. La Secretaría de Salud de Bogotá, resalta que de los individuos portadores de la variante del Reino Unido fueron identificados mediante los tamizajes rutinarios que realiza la Secretaría Distrital de Salud, como parte de la estrategia DAR y corresponden a individuos con antecedente de viaje reciente a los Estados Unidos.
 
Cortés ha indicado que “las medidas para evitar la distribución de las variantes son las mismas que venimos usando en general, es decir usar juiciosamente las medidas de prevención o de higiene, aislamiento, lograr una mayor vacunación y más rápida, porque a una mayor proporción de personas que este vacunada, mucho mejor”.
 
Igualmente, ha asegurado que “no son peligrosas, lo peligroso es si se diseminan más rápido, puede haber un mayor número de personas infectadas y en esa medida se podrían alcanzar los topes del sistema de salud en temas de cubrimiento, pero no parecen ser más letales”.
 
¿Las vacunas sirve para esas variantes?
 
“Los estudios con vacunas se han hecho de dos formas, uno es estudios clínicos, es decir ensayos en los cuales se mira efecto que la vacuna genera sobre personas que tienen las variantes o en áreas geográficas que tienen esas variantes. El otro es estudios en el laboratorio, en el cual se crean pseudovirion, especies de virus que asemejan la situación del virus con la variante y se utiliza el suero de personas que han sido vacunadas para ver si, esos sueros son capaces de controlar la replicación del virus en el laboratorio. Teniendo en cuenta eso, los estudios han demostrado que la variante sudafricana anula totalmente la inmunidad prevista por la vacuna de Oxford, que la mayoría de variantes graves, que son la británica, brasileña, sudafricana y una nueva que está apareciendo en California, parecen tener un impacto pequeño sobre las otras vacunas”.
 
“Las variantes afectan aparentemente a cualquier población, lo que pasa es que tienen una distribución geográfica en algunos países como mencionaba, se ve la variante británica, en Europa, en Sudáfrica, la variante sudafricana, y la brasileña en Brasil, Colombia y otras naciones.  En los últimos meses se observó una variante en California y al aparecer se está distribuyendo en todo Estados Unidos”, ha recalcado Cortés.

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