Edición Médica

Carlos Oliveros, miembro de la Junta Directiva de Asmedas Antioquia.

Redacción. Bogotá
El Hospital Alma Mater (HAMA) de la Universidad de Antioquia (UdeA) enfrenta una crisis financiera severa, convirtiéndose en el mayor deudor de la institución. Según ha manifestado Carlos Oliveros, miembro de la Junta Directiva de Asmedas Antioquia, desde que consolidó la nueva gerencia del hospital, las deudas de HAMA representan el 49 por ciento del total que la UdeA tiene pendiente de pago, con compromisos por arrendamiento y préstamos que han escalado a niveles insostenibles.
 
Esta situación financiera ha impactado gravemente el flujo de caja del hospital, afectando el pago puntual de salarios, generando pagos fraccionados, escasez de medicamentos y deterioro de la infraestructura física y del ambiente laboral. Oliveros ha advertido sobre la posibilidad de que la UdeA se vea obligada a vender el hospital como parte de una estrategia para mitigar su propia crisis económica, tras vender bienes por aproximadamente 70 mil millones de pesos en los últimos meses.
 
La situación crítica también se refleja en la relación del HAMA con las Entidades Promotoras de Salud (EPS). Oliveros ha cuestionado los contratos firmados con entidades como Savia Salud, que paga 700 millones de pesos mensuales de una deuda total de 62 mil millones, lo que perpetúa el déficit financiero del hospital.
 
Además, el directivo ha señalado irregularidades en el pago de salarios, deducciones poco claras y despidos de trabajadores con experiencia, factores que socavan el papel del HAMA como un hospital universitario que debería ser un centro de conocimiento e investigación.
 
En ese sentido, desde Asmedas se ha hecho un llamado a los órganos de control, a los ministerios de Salud y Educación, ya la Superintendencia de Salud para que tomen medidas urgentes. La Junta Directiva ha insistido en la necesidad de un diálogo con Savia Salud, Nueva EPS y otras entidades involucradas para buscar a la crisis financiera que afecta no solo al hospital, sino también a la calidad del servicio de salud en Antioquia.
 
Por último, Oliveros ha remarcado que la reducción del debate sobre el futuro del HAMA a un problema financiero es una simplificación injusta, y subraya la importancia de mantener su rol en la formación de profesionales de la salud y en la prestación de servicios de calidad a la comunidad. La situación actual, según ha alertado, requiere un análisis profundo y soluciones que vayan más allá de los intereses económicos, preservando el propósito social y educativo del hospital universitario.

El dato
 
Hace unos meses, durante un Foro para conocer a los aspirantes a la rectoría de la UdeA organizado por el Observatorio Universitario sobre el HAMA, se había advertido sobre la falta de pagos de las EPS, el aumento de la cartera con aseguradoras liquidadas y dificultades para determinar el estado real de sus finanzas. Los informes disponibles han sido calificados como poco claros, confusos e incluso contradictorios, complicando la valoración precisa del panorama económico del hospital.

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