JORNADA DE PROTESTA
Convocan a jornada de protesta nacional mientras hospitales públicos advierten colapso financiero
Las denuncias de los usuarios también han puesto en evidencia irregularidades en la administración de los recursos públicos de la Salud
Jornada de movilización en la que participaron gremios de pacientes hace un mes.
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Redacción. Bogotá
El sector salud en Colombia atraviesa una crisis sin precedentes, reflejada en la falta de financiamiento, la acumulación de deudas y la precarización del acceso a servicios esenciales. Ante esta situación, pacientes, usuarios y profesionales de la salud han convocado una jornada de protesta nacional para este 29 de enero, mientras que la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (ACESI) advierte sobre el
inminente colapso financiero de los
hospitales públicos.
Hoy a las 7:00 p. m., pacientes, cuidadores, médicos, enfermeras y demás profesionales de la salud
suspenderán sus actividades durante cinco minutos y realizarán un “cacerolazo” para visibilizar la crisis humanitaria que enfrenta el sector. Con la consigna "La salud en la UCI", los convocantes buscan exigir el pago de deudas atrasadas y una financiación sostenible del sistema de salud.
Según ha precisado la Superintendencia Nacional de Salud, en 2024 se registraron más de 1.
5 millones de reclamaciones por dificultades en el acceso a citas y medicamentos, la cifra más alta en la historia del país. A esto se suma un desfinanciamiento progresivo del sistema, estimado en 10 billones de pesos, lo que ha llevado al cierre de servicios en múltiples municipios y a la incertidumbre laboral del talento humano en Salud.
Cabe mencionar que, las denuncias de los usuarios también han puesto en evidencia
irregularidades en la administración de los recursos públicos de la salud, lo que ha llevado a intervenciones de las altas cortes y a múltiples debates de control político sin una solución definitiva.
El llamado de los hospitales públicos: soluciones inmediatas
Por su parte, la ACESI ha manifestado su preocupación ante la
falta de liquidez de los hospitales públicos, lo que afecta la disponibilidad de insumos y el pago del personal de salud. Aunque la entidad no apoya la suspensión de la prestación de servicios, ha hecho un llamado urgente al Gobierno Nacional, al Congreso y a las Entidades Administradoras de Planes de Beneficios (EAPB) para garantizar un flujo inmediato de recursos.
Los hospitales públicos han resaltado su participación clave en momentos críticos, como la pandemia de COVID-19, no obstante, hoy enfrentan una amenaza de colapso si no se adoptan soluciones estructurales y medidas de emergencia. ACESI propone que las EPS intervenidas sirvan como una oportunidad para que el gobierno demuestre su
voluntad de pago, garantizando el 100 por ciento de los recursos de cápita corriente y estableciendo acuerdos de pago a corto y mediano plazo.
Al respecto,
Olga Lucía Zuluaga, directora ejecutiva de ACESI ha manifestado su desacuerdo con incentivar la suspensión de servicios por cinco minutos, desde el punto de vista voluntario, debido a la coyuntura y la falta de recursos. Por ello, ha hecho un llamado a todas las entidades gubernamentales y al Congreso de la República para que
se agilice el proceso de la Reforma a la Salud, el cual sería clave para resolver esta crisis de financiamiento de los recursos asignados al sector Salud.
De igual forma, la Junta Médica Nacional (JMN), formada por organizaciones médicas gremiales, científicas y académicas de todo el país, solicitó el inicio de
investigaciones sobre las irregularidades en el manejo de recursos. También afirmó que es necesario realizar una Reforma al sistema de Salud.
Hace varios días, el presidente de la República,
Gustavo Petro, anunció que el Gobierno convocará
sesiones extraordinarias en el Congreso. Esto es para seguir discutiendo la Reforma a la salud, la cual continúa detenida debido al receso legislativo en diciembre del 2024.
Mientras los distintos actores del sistema de salud alzan su voz, la incertidumbre persiste. La jornada de protesta del 29 de enero busca
generar presión para obtener respuestas inmediatas, pero el llamado de los hospitales públicos evidencia que cinco minutos de manifestación no serán suficientes para resolver una crisis que sigue profundizándose.