Durante la pandemia 13.662 personas que viven con algún tipo de cáncer se contagiaron de COVID-19
Cerca de 1.271 pacientes que padecían algún tipo de cáncer han fallecido a causa de complicaciones asociadas a la COVID-19
Germán Fabián Godoy Pérez, urólogo oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología y de la Clínica del Country.
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Karen Juliete Rojas Gaitán. Bogotá
En la conmemoración del Día Mundial del Cáncer de Riñón, establecido por la Coalición Internacional contra el Cáncer de Riñón (International Kidney Cancer Coalition) en el año 2017, lo que
se busca es sensibilizar y concienciar a la población en general, cuidadores, organizaciones y profesionales de la salud acerca de esta patología.
Según ha indicado la Organización Panamericana de la Salud (OPS),
el cáncer de riñón es la segunda causa de muerte en América. Las proyecciones de la organización revelan que para el año 2030 se incrementarían en un 32 por ciento el número de pacientes con este diagnóstico, por el envejecimiento de la población y la modificación de hábitos que incrementan el riesgo.
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA,
Germán Fabián Godoy Pérez, urólogo oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología y de la Clínica del Country, ha explicado que “
básicamente el cáncer de riñón en su etapa temprana no tiene síntomas. Empieza a presentar síntomas cuando está más avanzado, se puede producir sangrado en la orina, dolor de espalda, pérdida del apetito, pérdida de peso, cansancio y dolor de huesos, pero en la mayoría de casos y en las primeras etapas no presentan ningún tipo de síntomas”.
Godoy Pérez ha contado que “
a nivel de Colombia es el tercero en presentación. Es mucho más frecuente en hombres que, en mujeres, pero hay unos grupos poblaciones en los que se puede presentar, por ejemplo, en niños y adolescentes, así como después de los 40 años. No hay acciones específicas que se puedan realizar para prevenirlo, aunque sí hay factores de riesgo y también les aparece a pacientes que no presentan esos. Entre los que se deben tener en cuenta están: tener una edad avanzada, fumadores, obesidad, tensión alta, insuficiencia renal. Aunque haya alguno de estos no significa que vaya a desarrollar la enfermedad”.
El Ministerio de Salud y Protección ha informado que “el principal factor protector para evitar la aparición de enfermedades no transmisibles lo constituyen los estilos de vida saludables, entendidos como los hábitos de una persona que lleva una alimentación sana y balanceada, con porciones apropiadas de frutas y verduras, sumado al mantenimiento regular y sostenido de actividad física, y
el abandono de hábitos perjudiciales como el consumo o exposición al humo del tabaco o sus derivados, así como la reducción del uso nocivo de las bebidas alcohólicas, y la conservación del tiempo necesario para el descanso y el sueño”.
La cartera da algunas recomendaciones como:
- La prevención y los estilos de vida saludables desde la niñez son el secreto para mantenerse saludables a lo largo de la vida.
- Disminuya el consumo de azúcares y aumentará su salud y su bienestar.
- Active su corazón y así reduzca el riesgo de diabetes: realice actividad física regular; con mínimo de 30 minutos diarios de caminata es suficiente.
-La grasa en las comidas endurece tus arterias, agota tu corazón y promueve la acumulación de azúcares en forma de grasa. Coma sano. Reduzca los fritos e incremente la ingesta de frutas y verduras en su dieta diaria.
- Valore su riesgo. Conozca sus cifras de tensión arterial, de glicemia y de peso corporal.
- Empiece el día con un vaso de agua.
- La clave para mantener su salud, a pesar de la enfermedad renal crónica (ERC) o de sus enfermedades precursoras, está en reducir de peso, alimentarse saludablemente, realizar actividad física moderada y constante, no fumar, evitar excederse con el alcohol y dormir el tiempo suficiente.
“Por lo general los pacientes van a chequeos por otras cosas y de manera incidental se diagnostica, debido a que los médicos les piden ecografías o exámenes de imágenes avanzadas, que permiten la detección del tumor en etapas tempranas, por lo general son tumores pequeños y su tratamiento es quirúrgico.
Lo que se ha conocido es que no sirven la quimioterapia, radioterapia, lo ideal en esos casos es extraer el tumor, con eso es suficiente y la mayoría de pacientes con eso se curan cuando la enfermedad no ha evolucionado. Pasa lo contrario con etapas avanzadas en las que ya el cáncer se ha expandido fuera del riñón”.
Y ha añadido que “de acuerdo a la localización y tamaño del riñón, se puede realizar una cirugía parcial, en la que se saca solo el tumor y se conserva el riñón,
pero si no se puede conservar el pedazo del riñón, se saca todo el riñón. Cuando se extrae no se necesita nada más”.
Por su parte, el Ministerio de salud ha resaltado que “con la infección por SARS-CoV2 plantea retos para la tamización, el diagnóstico y tratamiento del cáncer
. En el país desde el principio de la pandemia se han infectado con coronavirus 13.662 personas que viven con algún tipo de cáncer. Hasta el momento 1.271 de estos pacientes han fallecido a causa de complicaciones asociadas al COVID-19; cabe notar que el 92 por ciento de estos fallecimientos corresponde a mayores de 57 años”.
“Con la pandemia a muchos pacientes con algún tipo de cáncer les da miedo asistir a las consultas o las instituciones de salud les han retardado porque se les represaron, entonces
el seguimiento se ha visto afectado y el mismo paciente cuando consulta, se le encuentran un montón de enfermedades avanzadas, por la tardanza en las consultas”, ha finalizado el especialista.