MALAS INTERPRETACIONES
Hospitales aclaran que en ningún caso reciben dádivas por tener pacientes COVID-19 o por su deceso
El MinSalud ha esclarecido que, la disposición final de los cuerpos de los pacientes fallecidos a causa de virus se debe tratar mediante la cremación
Rubén Darío Londoño, gerente del hospital San Juan de Dios de Armenia.
|
Melba Lucía Murillo. Bogotá
Directivos de hospitales
niegan que han recibido dinero por la muerte de pacientes que fueron infectados con COVID-19, y aclaran que los recursos proporcionados por las autoridades corresponden a las llamadas canastas COVID-19, las cuales comprenden la prestación de los servicios y tecnologías que se han requerido para atender a los pacientes de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
Y es que, debido a malas interpretaciones por parte de los familiares de pacientes con COVID-19 fallecidos, cuando no han superado la enfermedad después de estar en las UCI, los directivos de varios hospitales han aclarado que la institución hospitalaria,
en ninguna circunstancia, recibe dádivas por tener un paciente COVID-19 o por su deceso.
Asimismo, los directivos han reiterado las disposiciones manifestadas por el Ministerio de Salud y Protección Social (MinSalud) ya que, tampoco pueden hacer la entrega de los cuerpos de las personas fallecidas a sus seres familiares para ser velados
, puesto que estos deberán ser cremados en menos de 24 horas.
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA,
Rubén Darío Londoño, gerente del hospital San Juan de Dios de Armenia, ha indicado que “
las disposiciones emitidas por el MinSalud cuando se dio la pandemia fueron acatadas como debían ser”, refiriendose a la manipulación de los cuerpos de los fallecidos por COVID-19.
“
La entidad ha venido haciendo el alistamiento del cuerpo en el sitio donde fallece, puesto que no pueden haber fluidos que se expongan al medio ambiente, no se retiran catetes, ni sondas y se tapan todos los orificios; además, el cuerpo se embala en una bolsa hermética que lleva cremallera, por tal razón, debe ser cremado en menos de 24 de horas”, ha explicado Londoño.
Londoño ha recalcado que, “por la muerte de una persona que padeció COVID-19, el hospital en ninguna circunstancia puede salir de las normas.
Aunque los familiares no acepten este procedimiento no se puede hacer de otra forma, porque ni siquiera se permite que sea velado. Entendemos que quieran velar al ser querido que acaba de perder la vida por la enfermedad, pero el cuerpo que ha sido identificado plenamente no puede ser destapado, porque se haría un contagio masivo”.
Cabe mencionar que,
cuando se generó la pandemia el MinSalud estipuló algunas excepciones, en el caso de no contar con instalaciones para el proceso de cremación del cadáver, se practicaría la inhumación en sepultura o bóveda.
De igual forma, la cartera de Salud ha enfatizado que se debían evitar las velaciones, despedidas o ceremonias religiosas para fallecidos por COVID-19,
puesto que el virus se propaga más fácilmente en espacios interiores o en aglomeraciones de personas.
Con respecto a lsituación presupuestal por la que tuvo que pasar el hospital, Londoño ha señalado que “
cuando se generó la pandemia en abril de 2020, el hospital tenía el 97 por ciento de ocupación, un mes después nos quedamos con el 37 por ciento de ocupación, es decir, nos quedamos sin pacientes”.
“Todo a raíz de la pandemia y eso no generó pérdidas,
dejamos de facturar 30 mil millones de pesos y a pesar de darse esa situación no cerramos, ni despedimos a los empleados. Sin ingreso el hospital siguió sosteniendo toda la planta de personal. Ya al año siguiente la situación financiera cambió y nos volvimos a recuperar”, ha concluido el directivo.
El dato
De acuerdo con el último reporte entregado por el Instituto Nacional de Salud (INS) en Colombia se demuestra que en Quindío han sido hospitalizadas alrededor de 81.303 personas desde que se inició la pandemia.
A la fecha sólo se encuentran recibiendo atención 63 personas; además que 2.032 pacientes perdieron la vida por causa del virus, de los cuales 762 fueron atendidos en las instalaciones del centro hospitalario San Juan de Dios entre los años 2020 y 2022. En el país el reporte de fallecidos está en 137.586.