Edición Médica

Colombia es uno de los países donde la leishmaniasis cutánea es prevalente.

Redacción. Bogotá
Las leishmaniasis son enfermedades de transmisión vectorial causadas por protozoos del género Leishmania, introducidos al organismo humano y animal por la picadura de un insecto flebotomíneo hembra del género Lutzomyia. Las manifestaciones clínicas de la enfermedad varían según la especie parasitaria, la respuesta inmune del hospedero y el estado evolutivo de la infección, y pueden presentarse de manera subclínica en algunos casos.
 
Las formas clínicas de leishmaniasis incluyen la leishmaniasis cutánea, la leishmaniasis mucosa y la leishmaniasis visceral. La transmisión puede ser zoonótica, proveniente de reservorios animales, o antroponótica, de otros humanos a través del vector.
 
A nivel mundial, la leishmaniasis cutánea es prevalente en países como Afganistán, Argelia, Brasil, Colombia, Irán, Irak, Perú y Siria. La leishmaniasis mucosa se reporta principalmente en Bolivia, Brasil, Etiopía y Perú. En América, la leishmaniasis visceral es notificada por Brasil, Bolivia, Colombia, Guatemala, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
 
En Colombia, la leishmaniasis es endémica en casi todo el territorio, exceptuando el Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, y Bogotá. Hasta la semana epidemiológica 24 de 2024, se han notificado 2,018 casos de leishmaniasis cutánea, mientras que mientras que en 2022 fueron 2,156. La incidencia nacional, excluyendo nueve casos importados, es de 20.51 por 100,000 habitantes en riesgo. En la última década, la incidencia ha disminuido un 7.7 por ciento anual.
 
Del total de casos, el 16.5 por ciento corresponde a militares, principalmente hombres de 18 a 44 años, con un promedio de edad de 24.6 años. Los departamentos con mayor número de casos son Putumayo, Meta, Chocó, Antioquia y Guaviare. La incidencia en la población general es de 17.20 por 100,000 habitantes, con 16 departamentos superando esta cifra, destacando Boyacá, Guaviare y Caldas.
 
La mayoría de los casos se presentan en hombres (68.1 por ciento), en personas afiliadas al régimen subsidiado del SGSSS (80.2 por ciento) y provenientes de áreas rurales dispersas (69.0 por ciento). La edad promedio es de 31.3 años, con el 56 por ciento de los casos en el grupo de 10 a 49 años y el 9.7 por ciento en menores de 10 años.
 
Las lesiones se localizan predominantemente en extremidades superiores e inferiores, seguidas de la cara y el tronco. El 91 por ciento de los casos recibe tratamiento, aunque hay departamentos con porcentajes menores, incluyendo Cali, Norte de Santander y Putumayo.
 
Para el caso de la leishmaniasis Mucosa, se han notificado 35 casos de leishmaniasis mucosa, con una incidencia de 0.35 por 100,000 habitantes en riesgo. El promedio de edad de los afectados es de 40.6 años, con una predominancia en hombres (77.1 por ciento), afiliados al régimen subsidiado (71.4 por ciento) y provenientes de áreas rurales (54.3 por ciento).
 
Los síntomas más comunes incluyen ulceración mucosa, rinorrea y obstrucción nasal, afectando principalmente las mucosas nasal, oral, labial, faríngea, genital, laríngea y de los párpados.
 
Respecto a la leishmaniasis Visceral, se han confirmado tres casos de leishmaniasis visceral en El Carmen de Bolívar. Los casos corresponden a una niña de un año, un niño de siete años y un hombre de 28 años, todos con condición final de vivo tras recibir tratamiento en Cartagena, Sincelejo y Montería.
 
Conclusiones y recomendaciones
 
El 98.2 por ciento de los casos notificados corresponden a leishmaniasis cutánea, el 1.7 por ciento a leishmaniasis mucosa y el 0.1 por ciento a leishmaniasis visceral. La mayor frecuencia de leishmaniasis cutánea ocurre en hombres de 20 a 49 años, en áreas rurales y en afiliados al régimen subsidiado del SGSSS.
 
Las lesiones de leishmaniasis cutánea se presentan principalmente en extremidades. El porcentaje de tratamiento de leishmaniasis cutánea es del 91 por ciento. La leishmaniasis mucosa afecta principalmente la mucosa nasal, oral, labial y faríngea. La letalidad por leishmaniasis visceral hasta el periodo epidemiológico VI es del 0 por ciento.
 
Por último, ha emitido medidas para el control y manejo efectivo de la leishmaniasis en el país, instando a verificar el registro adecuado de procedencia durante el proceso de notificación. También se requiere capacitar a los prestadores para la identificación de leishmaniasis y fomentar la articulación entre áreas de vigilancia en salud pública, laboratorio y entomología.
 

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