Tratamiento de la dermatitis atópica un gran reto para los profesionales de salud y pacientes
Esta patología inmune tiene un efecto debilitante en el 2-10 por ciento de los adultos y el 20 por ciento de los niños en el mundo
Lunes, 14 de septiembre de 2020, a las 16:18
Los pacientes reportan un serio impacto de la enfermedad en sus emociones.
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Redacción. Bogotá
Cada 14 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, varias instituciones internacionales han hecho un
llamado a la ciudadanía y comunidad médica para cambiar la forma en que se percibe a los pacientes y cómo se presta atención a esta enfermedad.
La dermatitis atópica es una enfermedad de la piel crónica e incurable, que se manifiesta en cualquier etapa de la vida (niñez hasta etapa adulta). Se caracteriza por erupciones en cualquier parte del cuerpo y picazón permanente, en muchas circunstancias afecta gravemente la salud de una persona y el bienestar general de las familias, pues causa dolor crónico, aislamiento social y una considerable carga financiera.
Con la llegada de la CoVID19,
la frecuencia y el uso de algunos jabones, desinfectantes o geles alcoholados pueden activar el círculo del rascado como respuesta a la picazón, lo que empeora los signos y síntomas en la piel provocando más inflamación. Las lesiones de la piel son solo un signo visible de lo que sucede en las capas mucho más profundas de la misma”, ha explicado Luis Sarmiento, especialista en Inmunología.
Esta patología inmune
tiene un efecto debilitante en el 2-10 por ciento de los adultos y el 20 por ciento de los niños en todo el mundo. Puede afectar las relaciones personales, disminuir el funcionamiento psicosocial, provocar la pérdida del sueño para los miembros de la familia y generar dolor y un sentimiento de impotencia al tratar con el sufrimiento diario del niño. Por ello, el cuidado de los pacientes, especialmente de los infantes, debe ser integral.
Debido a esto,
la Alianza Internacional de Organizaciones de Pacientes de Dermatología (GlobalSkin), la Federación Europea de Asociaciones de Pacientes de Alergias y Enfermedades Respiratorias (EFA) y la comunidad mundial de dermatitis atópica han pedido crear conciencia sobre la enfermedad y el impacto que tiene en las familias y los niños.
Por ejemplo, preguntémonos
“¿De qué manera usted se preocupa por la enfermedad? Reconocemos y validamos el costo emocional y la carga financiera que la dermatitis atópica puede tener en los pacientes y sus cuidadores y cómo esta enfermedad afecta la salud mental, restringe la vida y a menudo conduce a un mayor riesgo para el desarrollo de otras condiciones”, ha reflexionado Christine Janus, CEO de GlobalSkin.
Teniendo en cuenta que
“año tras año se progresa en la investigación científica y mediante nuestros esfuerzos de promoción comunitaria, todavía queda mucho por hacer. Hacemos un llamado a los profesionales de la salud y a los responsables de la toma de decisiones para que se unan a nosotros en este día de concienciación y demuestren cómo apoyan y cuidan a los pacientes con eccema atópico en todo el mundo. Juntos podemos hacer que el cambio suceda”, ha agregado.
Igualmente
ha invitado a los profesionales de la salud y los responsables de la formulación de políticas públicas a mostrar cómo cuidan a los pacientes y familias que viven con esta enfermedad. Cuando las personas que viven con eccema atópico reciben atención oportuna y adecuada, es posible lograr una mejor calidad de vida.
Algunos datos sobre la dermatitis atópica
Cada año
los pacientes con dermatitis atópica severa pueden llegar a tener hasta 192 días de exacerbaciones (brotes intensos), es decir, durante más de 6 meses tienen comprometido su estado de salud.
Los pacientes reportan un serio impacto de la enfermedad en sus emociones. 30 por ciento revela bastantes consecuencias emocionales y dos terceras partes no se siente optimista en relación con su enfermedad.
El 72 por ciento de pacientes con dermatitis atópica tiene comorbilidades, que incluyen asma (40 por ciento), alergias (38 por ciento), conjuntivitis alérgica (20 por ciento), alergia alimenticia (34 por ciento), rinosinusitis crónica (26 por ciento) o pólipos nasales (13 por ciento).