Edición Médica

Fernando Ruíz, ministro de Salud.

Redacción. Bogotá
En el marco del foro 'Los desafíos de la salud mental', el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez, ha enfatizado que, "completar el tema de salud mental va más allá de los gobiernos y de las coyunturas, es un tema estructural de nuestra sociedad y un tema crítico que debemos abordar".
 
Con respecto a la situación de la Salud mental a nivel mundial antes de la pandemia de COVID-19, Ruíz ha recalcado que la data se acercada a 1.000 millones de personas que sufrían algún trastorno mental. Cada año se pierden más de 12 mil millones de días hábiles debido a enfermedades mentales, lo que le cuesta a la economía global alrededor de USD $16 billones, más que el cáncer, la diabetes y las enfermedades respiratorias.
 
Por otro lado, las encuestas en Colombia han señalado que, la depresión es la segunda causa de carga de enfermedad; la primera causa es la enfermedad cardiovascular. El 44,7 por ciento de las niñas y niños tienen indicios de algún problema mental y el 2,3 por ciento tiene Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad.
 
Asimismo, los estudios han evidenciado que, en la adolescencia los trastornos más frecuentes son la ansiedad, fobia social y depresión; la ideación suicida se presenta en el 6,6 por ciento de esta población (7,4 por ciento en mujeres y 5,7 por ciento en hombres). En la adultez, el 6,7 por ciento ha experimentado trastornos afectivos.
 
 El consumo de alcohol y otras sustancias psicoactivas inicia en promedio a los 13 años y las sustancias psicoactivas más consumidas son el alcohol, el tabaco y la marihuana, incrementando el riesgo de enfermedades crónicas, disfunción familiar, pérdida de redes sociales y patología dual.
 
Para el 2019 se habían registrado 2.909 muertes por suicidio. Los territorios donde se concentró el mayor número de casos fueron Caldas, Huila, Putumayo, Vaupés, Norte de Santander y Santander, en relación con aspectos estructurales como la situación económica, el desempleo, fenómenos de aculturación y pérdida de los territorios y prácticas ancestrales, así como presencia de conflictos familiares, conflictos de pareja, enfermedad física o trastorno mental.
 
El panorama de la Salud mental en la pandemia
 
El jefe de la cartera de Salud ha asegurado que, la llegada del COVID exacerbó los problemas de salud mental, dada la ruptura de espacios sociales y el aislamiento, entre otros, incrementando en más del 25 por ciento trastornos de ansiedad y depresión.
 
"En nuestro país, se identificó riesgo en salud mental, asociado a ansiedad o depresión, en el 30,1 por ciento de las personas encuestadas en el 'Estudio resiliencia y riesgos en salud mental durante la pandemia', realizado en 2020; lo cual quiere decir que es tres veces superior a lo encontrado en la ENSM", ha apuntado.
   
Ruiz Gómez ha asegurado que, para atender esta problemática de salud pública, "Colombia, en 2019, estableció una Política Nacional de Salud Mental y la Política Integral de Prevención y Atención al Consumo de Sustancias Psicoactivas; se expidió un CONPES, se incluyeron tecnologías y medicamentos para atención integral, se desarrollaron diferentes estrategias intersectoriales en promoción, prevención, tratamiento e inclusión social".
 
También, se han implementado estrategias de reducción de riesgos y daños para personas que se inyectan drogas, en Bogotá, Medellín, Cali, Cúcuta Armenia, Pereira, Dosquebradas y Santander de Quilichao; así como procesos de formación continua para la atención integral en salud y proyectos locales de prevención.
 
Acciones estratégicas desarrolladas en el contexto de la pandemia:
  Próximos retos por afrontar
 
De igual forma, desde el Ministerio de Salud y Protección Social, a través de la Dirección de Promoción y Prevención y su Subdirección de Enfermedades No Transmisibles han planteado varios retos en materia de salud mental en el país:
  Finalmente, Ruíz ha resaltado que "hay que reconocer la dignidad humana como principio y valor en coherencia con todas las acciones que dentro de los diferentes sectores se desarrollan. Si no hay un reconocimiento de la dignidad humana, de una sensibilidad desde el estado, las personas, los grupos sociales, hacia las problemáticas del otro, simplemente no podremos tener un abordaje correcto de la salud mental".

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