FACTORES DE RIESGO
OMS da a conocer el plan mundial que prevé abordar la principal causa de muerte en el parto
A pesar de ser prevenible y tratable, la HPP provoca alrededor de 70.000 muertes cada año
Miércoles, 11 de octubre de 2023, a las 15:39
Pascale Allotey, directora de Salud Sexual y Reproductiva de la OMS.
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Redacción. Bogotá
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho público hoy su primer marco de acción destinado a abordar la hemorragia posparto (HPP), una afección que se define como el sangrado excesivo que se presenta después del proceso de parto y que afecta a millones de mujeres anualmente, siendo la principal causa de
mortalidad materna en todo el mundo.
A pesar de ser una condición prevenible y tratable,
la HPP sigue cobrando la vida de aproximadamente 70,000 mujeres cada año. Aquellas que logran sobrevivir enfrentan posibles discapacidades y traumas psicológicos que pueden perdurar durante años.
Por su parte,
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, ha expresado que, "el sangrado severo durante el parto es una de las causas más frecuentes de mortalidad materna, y sin embargo, es altamente prevenible y tratable. La nueva hoja de ruta que presentamos traza el
camino hacia un mundo en el que más mujeres puedan experimentar un parto seguro y un futuro saludable junto a sus familias".
El objetivo fundamental de esta hoja de ruta es auxiliar a los países en la mitigación de las notables disparidades en los resultados de supervivencia de la HPP, las cuales
reflejan profundas inequidades en el acceso a servicios de salud fundamentales.
Más del 85 por ciento de las muertes a causa de HPP tienen lugar en la región subsahariana de África y el sur de Asia. Entre los factores de riesgo se incluyen la anemia, anomalías placentarias y otras complicaciones del embarazo, como infecciones y preeclampsia.
Un componente fundamental en la prevención de la HPP es la provisión de una atención prenatal de alta calidad, que incluya la realización de ecografías, así como una atención efectiva durante las horas posteriores al parto.
La detección temprana y el tratamiento inmediato en caso de hemorragia resultan esenciales.
No obstante, con demasiada frecuencia, los centros de salud carecen de los recursos necesarios, entre ellos, personal capacitado y suministros críticos, como oxitocina, ácido tranexámico y unidades de sangre para transfusiones.
Al respecto,
Pascale Allotey, directora de Salud Sexual y Reproductiva de la OMS y el Programa Especial de las Naciones Unidas para el Desarrollo de Investigaciones y Capacitación en Reproducción Humana (HRP), ha subrayado la necesidad de un enfoque integral para abordar la HPP, centrándose tanto en la prevención como en la respuesta, incluyendo la prevención de factores de riesgo y el acceso inmediato a tratamientos cuando sea necesario.
Se requieren esfuerzos más amplios para reforzar los derechos de las mujeres en materia de atención materna.
Se ha estimado que una mujer fallece cada dos minutos debido a complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto. A pesar de algunos avances limitados desde 2015, el mundo se encuentra
lejos de alcanzar las metas relacionadas con los
Objetivos de Desarrollo Sostenible en esta materia.
La
Hoja de ruta para combatir la hemorragia posparto entre 2023 y 2030 describe objetivos y actividades para la investigación, el trabajo normativo, la implementación y la promoción.
Las acciones prioritarias incluyen la elaboración de directrices más amplias que abarquen la prevención, detección y tratamiento de la HPP; investigación para fomentar la innovación y
ampliar el acceso a intervenciones probadas; la creación de un nuevo mecanismo de adquisición para mejorar el suministro de medicamentos y productos de alta calidad; campañas de sensibilización; capacitación y mejoras en las instalaciones a nivel nacional.
Este marco de acción ha sido desarrollado a través de extensas consultas que
involucraron a más de 130 expertos de diversas áreas, y su implementación será guiada por un comité directivo interdisciplinario.
La OMS y sus colaboradores proporcionarán apoyo técnico especializado a los países para adaptar las pautas globales a las políticas nacionales, comenzando por las regiones con las tasas más elevadas de mortalidad materna.