Edición Médica

Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Redacción. Bogotá
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó su nuevo Plan Estratégico Mundial de Preparación y Respuesta contra el dengue y otros arbovirus transmitidos por mosquitos del género Aedes, como el zika y el chikungunya.
 
Este plan busca reducir la carga de morbilidad, sufrimiento y mortalidad asociadas a estas enfermedades, a través de una respuesta global coordinada y acciones específicas que involucren a varios sectores de salud pública.
 
Con una población mundial cada vez más expuesta, la OMS estima que cerca de 4.000 millones de personas están en riesgo de contraer infecciones por arbovirus, cifra que podría alcanzar los 5.000 millones para 2050. Desde 2021, el número de casos de dengue ha ido en aumento en las seis regiones de la OMS, alcanzando más de 12,3 millones de casos a agosto de 2024, casi el doble de los 6,5 millones reportados en 2023.
 
El dengue es endémico en las zonas tropicales y subtropicales, con mayor prevalencia en el sudeste asiático, el Pacífico occidental y las Américas. En África, la situación es aún más crítica, pues los sistemas de salud frágiles enfrentan múltiples desafíos, incluidos conflictos y desastres naturales. Ante esta escalada, la OMS ha declarado el brote global de dengue como una emergencia de grado 3, su nivel más alto, para movilizar recursos y fortalecer la vigilancia en los países afectados.
 
El Plan Estratégico de Preparación y Respuesta (SPRP) se basa en cinco componentes esenciales para mitigar el impacto del dengue y otros arbovirus:
   
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha subrayado la urgencia de una respuesta integral ante esta amenaza global: "Todos tenemos un papel que desempeñar en la lucha contra el dengue, desde la limpieza de entornos hasta la mejora en el control de vectores y la atención médica oportuna".
 
El plan se implementará hasta septiembre de 2025 y cuenta con un presupuesto de 55 millones de dólares para reforzar las capacidades de preparación y respuesta en los países más afectados. Está alineado con la Respuesta Mundial para el Control de Vectores 2017-2030 y la Iniciativa Mundial contra los Arbovirus, lanzada en 2022, para combatir estas enfermedades con potencial epidémico.
 
Este esfuerzo global hace un llamado a todas las partes interesadas, desde gobiernos y profesionales de la salud hasta las comunidades, para colaborar en la lucha contra el dengue y los arbovirus mediante la innovación y mejores estrategias de control.

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