Voluntarios en Santander presentaron síntomas leves tras aplicarse la vacuna contra la CoVID19
La Fundación ha manifestado que ningún paciente ha presentado algún evento adverso o ha requerido hospitalización
Miércoles, 14 de octubre de 2020, a las 17:04
Federico Silva, director de la Unidad de Estudios Clínicos de la FCV.
|
Redacción. Bogotá
La multinacional Johnson y Johnson ha informado el 12 de octubre que, debido a una enfermedad inexplicable en un voluntario del estudio, los ensayos clínicos de la vacuna contra la CoVID19 han sido suspendidos por la farmacéutica.
Uno de los centros clínicos en los que se ha desarrollado estos ensayos fue en la Fundación Cardiovascular de Colombia (FCV) ubicada en Floridablanca, Santander.
La aplicación de la ampolla dio inicio el pasado miércoles 7 de octubre, sin embargo, solo se logró aplicar la vacuna en 26 voluntarios.
"Se incluyeron 26 personas al estudio de la institución de los cuales han presentado algunos síntomas como
fiebre y malestar general, pero ninguno ha presentado ningún evento adverso grave ni ha requerido hospitalización", ha manifestado a medios locales
Federico Silva, director de la Unidad de Estudios Clínicos de la FCV.
El especialista ha agregado que la clínica se comprometió a
contactar a cada una de las personas participantes para ponerlas en conocimiento sobre la problemática que se presentó en la aplicación de la vacuna y la posterior suspensión del ensayo.
“Nuestro compromiso con el cuidado de las personas en investigación se mantiene de acuerdo a los exigentes estándares de la investigación y la ética,
siempre dando prioridad al cuidado de las personas que participan en estos proyectos”, ha recalcado Silva a través de un comunicado.
En el centro clínico
900 personas fueron las voluntarias, de las cuales 500 han recibido la ampolla. Durante 2 años se estarían monitoreando entre citas médicas y exámenes para verificar el comportamiento de los pacientes.
Ensayos clínicos que detuvieron su proceso
Según el gigante farmacéutico Johnson & Johnson, representado por el laboratorio Jenssen, el pasado 12 de octubre
uno de sus pacientes de fase III presentó una “enfermedad inexplicable”.
El laboratorio ha informado
que la persona es monitoreada y evaluada por una junta independiente, así como también por doctores clínicos y una junta de la empresa. Por ello han enfatizado que cerraron su registro virtual que pretendía reclutar cerca de 60.000 pacientes voluntarios.
AstraZeneca también ha informado que detuvo su fase III, la más avanzada en el mundo. El laboratorio que trabaja de la mano con la Universidad de Oxford ha indicado que pausó sus pruebas finales en septiembre por “
una enfermedad inesperada en un voluntario en Reino Unido. Sin embargo, durante el mismo mes decidieron que era seguro continuar”, según ha constado en un comunicado.